Madura de pelo corto se la tiene que comer doblada

Reputada madura arquitecta tiene la fama de ser muy estricta y dura con todos sus empleados del despacho, pero luego en sus relaciones sexuales busca a tíos que la sometan y la follen bien fuerte. Además tiene debilidad por los chicos jóvenes, como no podía ser de otra forma con una mujer madura, y tiene un amante favorito dotado de un gran pene que la humilla y la hace gozar como a una perra. La folla por la boca con su gran polla casi hasta dejarla sin respiración, su pene largo pasa la campanilla y parece que como si fuese una fakir le baja por la garganta. Pero para gustos los colores y a esta sexy y caliente madura es lo que la pone a cien a pesar de la fama que tiene en el mundo laboral.