Mamá llega con muletas del hospital y pilla a la zorrita con una buena verga en la boca

Con el nuevo chico que había conocido se había olvidado que su madre salía del hospital esa mañana. Estaba tan caliente y absorta delante de la gran polla que tenía el chico que se le fue el santo al cielo, y cuando llegó la madura mamá a casa y entró con las muletas primero tuvo un cabreo enorme pero luego le pasó lo mismo que a la jovencita. Vio el pene gigante del chaval y se quedó relamiéndose los labios y con las bragas mojadas, así que a pesar del yeso y las recomendaciones que estuviera en reposo, aceptó la invitación de la joven pareja a unirse al fantástico trío. Entre las dos se turnaron para pasar un buen rato lamiendo ese duro tronco que segregaba jugo bien rico para calmar su sed de sexo.