Mi complaciente esposa hace realidad mi sueño

Mi esposa sabía que mi mayor fantasía era la de hacer un trío con dos tías, y tuve la suerte de que ella se hiciera amiga de una morena muy putona y liberal que, cuando se lo contó, se ofreció a participar a cambio de tener sexo con los dos. Mi esposa, que nunca se había sentido atraída por las tías, pensó que era una buena oportunidad para tener su primer experiencia lésbica y aceptó a la primera.