Ninfómana esposa infiel flirtea con el apuesto y dotado vecino

Es lo que tiene no trabajar y tener todo el tiempo del mundo para el ocio y para aburrirse. Y esta afortunada y bella madura tetona de brazos tatuados tiene una vida tan acomodada que no tiene necesidad de buscar trabajo. Así que hace sus rutinas matutinas de ejercicio en casa por las mañanas y luego sale a la terraza a tomar el sol y broncearse su sinuoso y bello cuerpo. Además hay un nuevo vecino en la casa de al lado, un joven guitarrista de un grupo de rock con el que intercambia un saludo amistoso y alguna que otra mirada furtiva. Después de algunas mañanas viéndose y dándose un buen repaso mútuamente el joven vecino llama a su puerta. No hay que decir mucho más, ella ya sabe a lo que viene, y la realidad es que lo deseaba y lo esperaba como de chica a que llegaran los reyes Magos.