Secando las lágrimas de la madre con una buena corrida

Mientras se seca el pelo después de la ducha la madre recibe una llamada inesperada. Cuando cuelga es un mar de lágrimas que corren por su cara y sus llantos son escuchados por el joven de la habitación de al lado. Nada mejor que un buen abrazo para que la madura desconsolada se sienta arropada. El único problema es que en un video porno todo acaba en una buena jodienda y la tristeza de la madrastra se convierte en alegría al sentir ese pene joven penetrando su coño.